Un traductor de mascotas podría estar disponible en menos de una década.

Los perros no pueden hablar humano. Aquí está la tecnología que podría cambiar eso.

¿Qué pasa si tu perro o gato puede hablar en lugar de ladrar o maullar? Sabrías cuánto te ama Rover, y tal vez cuán triste es Fluffy por ese desastre en la alfombra.

Todos sabemos que eso no va a suceder. Pero los avances recientes en inteligencia artificial y aprendizaje automático sugieren que el sueño de larga data de poder conversar con los animales, de manera limitada, podría convertirse en una realidad.

Con la ayuda de AI, los científicos están aprendiendo a traducir las vocalizaciones y expresiones faciales de los animales en algo que podamos entender. Los avances recientes incluyen un sistema de IA que escucha a los monos tití para analizar la docena de llamadas que utilizan para comunicarse entre ellos y uno que lee las caras de las ovejas para determinar si un animal está sufriendo .

Tomando nota de la investigación, un informe patrocinado por Amazon sobre las tendencias futuras publicadas el verano pasado predijo que en 10 años, tendremos un traductor para mascotas.

QUÉ PERROS DE LAS PRADERAS TIENEN QUE DECIR

El Dr. Con Slobodchikoff, profesor emérito de biología en Northern Arizona University y autor de "Chasing Doctor Dolittle: Learning the Language of Animals", está a la vanguardia de la comunicación animal. Más de 30 años estudiando perros de la pradera lo han convencido de que estos Los roedores de América del Norte tienen una forma sofisticada de comunicación vocal que es nada menos que el lenguaje.

Los perros de la pradera hacen llamadas agudas para alertar al grupo de la presencia de un depredador. Slobodchinoff descubrió que esas llamadas varían según el tipo de depredador y su tamaño. Los animales pueden combinar sus llamadas de varias maneras e incluso pueden usarlas para indicar el color de la ropa de un humano cercano.

Pero Slobodchinoff no estaba contento solo por entender perros de las praderas. Con la ayuda de un colega científico informático, desarrolló un algoritmo que convierte las vocalizaciones en inglés. Y el año pasado, fundó una compañía llamada Zoolingua con el objetivo de desarrollar una herramienta similar que traduzca sonidos de mascotas, expresiones faciales y movimientos corporales.

"Pensé que si podíamos hacer esto con perritos de las praderas, sin duda podríamos hacerlo con perros y gatos", dijo Slobodchikoff.

El trabajo está en una etapa temprana. Slobodchikoff está acumulando miles de videos de perros mostrando varios ladridos y movimientos corporales. Utilizará los videos para enseñar un algoritmo de IA sobre estas señales de comunicación. El algoritmo aún necesita que se le diga qué significa cada corteza o cola, y en este punto eso significa que los humanos debemos ofrecer sus propias interpretaciones. Pero Slobodchikoff pretende incorporar la creciente investigación científica que utiliza experimentos cuidadosos en lugar de conjeturas para descifrar los verdaderos significados del comportamiento de los perros .

El objetivo final de Slobodchinoff es crear un dispositivo que pueda apuntar a un perro para traducir sus palabras en palabras inglesas, por ejemplo, Slobodchiknoff dijo: "Quiero comer ahora" o "Quiero ir a caminar".

¿QUÉ SIGNIFICARÍA LA COMUNICACIÓN ANIMAL?

Ser capaz de comunicarse con los animales significaría algo más que forjar vínculos emocionales más estrechos con ellos. Podría eliminar las conjeturas sobre el cuidado de los animales e incluso salvar sus vidas.

Solo en los EE. UU., Se estima que cada año se sacrifican 3 millones de gatos y perros no deseados , en muchos casos debido a sus problemas de comportamiento poco conocidos. Pero un perro que exhibe agresión podría simplemente tener miedo, y si contamos con la tecnología para comprender sus miedos, podríamos encontrar una forma de perdonarle la vida. "Podrías usar esa información y en lugar de respaldar al perro en una esquina, dale más espacio al perro", dijo Slobodchikoff.

De manera similar, la tecnología de IA podría facilitar las cosas a los granjeros y rancheros, por ejemplo, al identificar rápidamente a los animales que están enfermos al detectar signos de dolor en sus rostros.

"A los agricultores les resulta difícil reconocer el dolor en las ovejas", dijo la Dra. Krista McLennan, profesora de comportamiento animal en la Universidad de Chester en Inglaterra. Desarrolló una escala para estimar los niveles de dolor basados ​​en las expresiones faciales de los animales: labios retraídos, orejas dobladas, etc.

Pero cuando el entrenamiento de personas para usar la báscula resultó difícil, el Dr. Peter Robinson, un profesor de la Universidad de Cambridge que ha desarrollado sistemas informáticos que leen expresiones faciales humanas , convirtió la escala de McLennan en un algoritmo de inteligencia artificial. Cuando a la computadora que ejecutaba el algoritmo se le mostraron cientos de fotos de ovejas, algunas sanas y otras no, aprendió a decir qué animales estaban sufriendo.

Aunque confinado al laboratorio por ahora, la tecnología podría algún día ser comercializada, quizás en forma de una cámara que automáticamente fotografíe a las ovejas cuando pasen por una puerta, dijo Robinson. Si un animal muestra dolor, el ranchero recibirá una alerta automática.

Tal sistema podría ser mucho más rápido que los humanos al detectar animales enfermos, y más confiable. "La razón por la que estoy un poco optimista es que en nuestra investigación con las caras de las personas, nuestro sistema automático era tan bueno como el 10 por ciento de las personas, mucho mejor que la persona promedio", dijo Robinson.

Robinson y McLennan quieren expandir su trabajo a otros animales, y tal vez a otros indicadores además del dolor. "Estamos viendo el dolor porque es el más significativo en términos de bienestar", dijo McLennan. "Pero no hay nada que nos impida mirar otras emociones también". ¿Cómo es una oveja feliz? ¿Cómo es una oveja triste? Pero todavía hay que hacer mucho trabajo ".

¿PODEMOS REALMENTE ENTENDER A LOS ANIMALES?

Incluso si un traductor de AI se convierte en realidad, no necesariamente significa que alguna vez tendrá una conversación sincera con su mascota. Existen grandes diferencias entre la cognición humana y animal , y estamos muy lejos de entender lo segundo.

Una tecnología que puede darnos acceso a la misteriosa vida mental de los perros es la imagen cerebral. En los seres humanos, la resonancia magnética funcional (fMRI) se puede utilizar para detectar ciertos estados mentales observando la actividad cerebral.

"Veo algo así con los perros", dijo el Dr. Gregory Berns, neurocientífico de la Universidad de Emory y autor de "Lo que es ser un perro: y otras aventuras en la neurociencia animal". Berns ha estado entrenando perros para que permanezcan quietos dentro de escáneres cerebrales mientras la máquina lee su actividad cerebral. Sus experimentos ya han abierto una ventana a lo que los perros pueden pensar o sentir: por ejemplo, ha encontrado evidencia de que los perros nos ven como amigos, y no solo las manos que los alimentan.

"Su sistema de recompensa en el cerebro es impulsado tanto por los elogios como por los alimentos", dijo Berns. "Esto refuerza la idea de que el perro disfruta del vínculo social con los humanos por sí mismo".

Quizás algún día la tecnología nos convierta a todos en el Dr. Dolittles para que podamos estrechar aún más el maravilloso vínculo entre las personas y sus mascotas.

Fuente: nbcnews